Universitat Oberta de Catalunya

Realidad, computación y virtualidad

Nuestra situación en el mundo contemporáneo está caracterizada por la presencia sin precedentes de imágenes almacenadas, procesadas y transmitidas computacionalmente. Esta condición se encuentra en un punto de desarrollo tal que cuestiona las concepciones tradicionales de realidad y virtualidad. Indagar teóricamente para profundizar en estos conceptos resulta difícil, en gran medida debido a la velocidad con la que se transforma el presente en su interacción con las tecnologías electrónicas. Una luz de entendimiento se puede encontrar en el trabajo del filósofo checo-brasileño Vilém Flusser (1920-1991) en torno a la filosofía de la fotografía y, en particular, en lo referente a las imágenes técnicas, ante todo porque, para él, las imágenes técnicas, las imágenes producidas por aparatos, representan un cambio fundamental en la historia. La razón es que las imágenes técnicas desplazan el papel que tenía anteriormente la escritura por su capacidad de representación de la realidad de una manera distinta, de manera icónica.

La escritura entendida como un sistema de codificación del lenguaje natural ha sido entendida como la portadora de «la verdad» en los contextos religioso, filosófico y legal. La aparición de la escritura hace unos seis siglos marcó un antes y un después en las prácticas humanas. Sin embargo, más recientemente, en el siglo XIX, la aparición de las imágenes técnicas, ejemplificadas por la aparición de la fotografía, transforman de manera radical los modos y los medios de comunicación. Dicho de otro modo, para Flusser, las imágenes técnicas, representan un cambio fundamental similar al de la aparición de la escritura porque precipitan un momento cultural posthistórico en el que se desplaza el rol cultural que la escritura había mantenido exclusivo, pero que ahora precisa negociarlo con la imagen técnica. Sin embargo, existen dos aspectos que escapan al inspirador análisis de Flusser y que vale la pena explorar para proponer respuestas a las preguntas planteadas. Uno de los caminos para adentrarse en la dicotomía escritura-imagen es acudir a las genealogías tanto de la escritura como de las imágenes técnicas, a lo que desde mi punto de vista es necesario agregar sus transformaciones recientes en lenguajes de programación e imágenes técnicas computacionales respectivamente.

Por un lado, es necesario estudiar el significado de la aparición en diferentes lugares del mundo hace unos 6.000 años, de las diversas formas de escritura y de la evolución de la escritura alfabética como soporte y transmisor del lenguaje natural en la cultura occidental. Por otro lado,visitar el sentido de la aparición de la fotografía, examinando el relato de su múltiple invención en su instancia fotoquímica que conecta a Niepce, Bayard, Daguerre, Florence, Talbot y Atkins en el siglo XIX con a lo que Flusser se refirió como imagen icónica. No obstante, resulta necesario ampliar esa indagación genealógica con una doble operación. En primera instancia,proponiendo un programa para establecer una conexión con la génesis de los lenguajes de programación en el mundo contemporáneo, los lenguajes que sirven de intermediarios entre los humanos y las máquinas, que tienen diferentes instancias, desde una codificación alfabética y numérica hasta la traducción al llamado lenguaje de máquina. Y en segunda instancia, ampliando la investigación histórica de la fotografía a la aparición de la fotografía mediada por computadores. Esta es una historia que ya no está tan solo en el dominio de los inventores individuales, sino también en el contexto de laboratorios como el SEAC, en 1957, en Estados Unidos. Esta es una génesis menos conocida pero igualmente importante de la imagen, lo que sucedió en los momentos seminales de la digitalización de la fotografía. En último lugar, de lo que se está hablando es de la génesis de los píxeles y de los métodos computacionales para almacenar, procesar y transmitir imágenes.

Estos procesos de descifrar los lenguajes de programación como parte de la evolución de la escritura o de entender la imagen computacional como parte de la imagen técnica en general resultan ser más complejos de lo que se podría anticipar. Por elegir un ejemplo del campo visual, referirse al tema de la «imagen digital» implica un problema grave, dado que su ontología se da por entendida, por explicada, cuando en realidad en muchos casos ni siquiera sus elementos técnicos básicos son comprendidos y son comúnmente mal interpretados. Por si esto fuera poco, algunos constructos teóricos están basados en dichos malentendidos. Voy a referirme al tema sin rodeos: los píxeles son invisibles; la imagen digital como tal no existe, al menos no como categoría perceptual; y los bits y bytes son abstracciones, pero son ante todo estados electromagnéticos físicos.

Vamos a las bases, la etimología de la palabra píxel nos revela que se trata de un acrónimo de naturaleza tautológica, dado que viene de picture element. El punto de partida es que los píxeles, el aparente ladrillo de la imagen digital contemporánea, ha sido celebrado con frecuencia, pero de manera imprecisa, ya que los píxeles se presentan como elementos constitutivos de la imagen visual, cuando en realidad son invisibles porque son estructuras para almacenar información binaria, bits y bytes, y tan solo cuando estos hacen parte de un constructo más amplio, el de los mapas de bits, pueden ser renderizados o rasterizados, lo que los hace finalmente visibles en pantallas o en impresos. Con la aparición y la popularización de los mapas de bits, que son la base de la fotografía digital, entramos en una etapa diferente a la de la imagen técnica fotoquímica, porque la imagen computacional es a la vez icónica y codificada, es codificada de manera numérica en términos de unos y ceros. Es decir, es una imagen escrita, solo que está escrita y manipulada de manera numérica. Esa es la doble instancia de la fotografía computacional, pero entonces ¿cuál es la naturaleza de la imagen digital? Dado que los ojos no ven bits y bytes, los ojos ven luz, son sensores de fotones, si una imagen se ve con los ojos es análoga.

Si, por lo tanto, las imágenes digitales no son visibles como tal, a menos que haya un proceso de transducción de energía que las haga visibles de manera análoga y que los píxeles que constituyen el sustrato básico desde el punto de vista informático son en realidad una manera de organizar bits y bytes, entonces, ¿qué son los bits y bytes? Por un lado, son abstracciones que permiten organizar y hacer operaciones con dígitos binarios, un tipo de números posicionales, pero, por otro lado, y sobre todo, son estados electromagnéticos en transistores, en colecciones de transistores minúsculos, tan pequeños que no se pueden ver con los ojos directamente, aunquepor supuesto existen. El historiador de la tecnología W. Patrick McCray afirma que «hoy por hoy hay más transistores que granos de arroz», esto puede ser cierto, dado que están por millones dentro de cada uno de los circuitos integrados (chips), que a la vez están dentro de nuestros dispositivos electrónicos como teléfonos y computadores. Un chip comercial puede llegar a tener unos 15.000 millones de transistores, y estos son la materialidad de los ceros y los unos. No los vemos excepto cuando se organizan en píxeles y después se traducen en fenómenos visibles a través de los display elements de las pantallas. Esas consideraciones de la hibridez del mundo digital y analógico están presentes en algunos de los debates más importantes de la filosofía de la tecnología, ejemplificada de manera clara en la afirmación de Friedrich Kittler (1943-2011) «There is no Software», a la que Lev Manovich (1960) responde «There is only Software».

Recordemos ahora que este texto empezó señalando la diferencia entre imagen icónica e imagen técnica en su relación con la representación de la realidad; a mi entender, las reflexiones de Flusser sobre la filosofía de la fotografía apuntan en una dirección muy inspiradora, pero, como el nombre de su libro al respecto indica, es una filosofía por construir y, en ella, la condición de la imagen computacional no está considerada en su complejidad, lo cual puede ofrecer una interesante oportunidad para ser pensada por su doble naturaleza icónica y codificada. Lo que sí estamos viviendo en este momento es la exuberancia de la capacidad de ese tipo de imagen de transformar la realidad, no solo por lo que representa sino por su capacidad de ser procesada, transmitida y retransmitida. Es ahí donde las reflexiones de la última etapa de Flusser podrían ser necesarias y complementarias, es decir, sus reflexiones sobre la realidad y la virtualidad, donde el punto de partida se podría definir como que la realidad es de hecho una forma de virtualidad que interactúa con otras virtualidades, algunas de ellas técnicas como la VR o algunas de ellas electroquímicas, como las imágenes mentales y los sueños. Una invitación a entender la realidad como una interacción de esas virtualidades, la biológica y la técnica, donde la computación es un componente fundamental.

Quizás, no es que no acabamos de entender culturalmente el mundo digital, es que no lo hemos empezado a entender.

Documentación:

FLUSSER, Vilém (2011). Into the Universe of Technical Images. University of Minnesota Press. DOI: https://doi.org/10.5749/minnesota/9780816670208.001.0001

FLUSSER, Vilém (2016). Vilém Flusser y la Cultura de la Imagen: Textos Escogidos. Ediciones Universidad Austral de Chile.

FLUSSER, Vilém (2018). Hacia una filosofía de la fotografía. La marca editora.

KITTLER, Friedrich (2017). No hay Software y otros ensayos sobre filosofía de la tecnología. Universidad de Caldas editorial. DOI: https://doi.org/10.2307/j.ctv8xnjb3

MANOVICH, Lev (2011). «There is Only Software» [en línea]. Website personal. Disponible en: http://manovich.net/content/04-projects/066-there-is-only-software/63-article-2011.pdf

MCCRAY W., Patrick (2022). «there are more manufactured transistors than grains of rice». [en línea]. Publicación en Twitter.

RAY SMITH, Alvy (2022). A Biography of the Pixel. MIT Press. DOI: https://doi.org/10.7551/mitpress/13470.001.0001


Cita recomendada: BURBANO, Andrés. Realidad, computación y virtualidad. Mosaic [en línea], marzo 2023, no. 198. ISSN: 1696-3296. DOI: https://doi.org/10.7238/m.n198.2302

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