Universitat Oberta de Catalunya

Entrevista a Jaime Serra

Jaime Serra Palou (Lleida, España, 1964) es un artista multidisciplinar y periodista que ha trabajado durante los últimos veinticinco años experimentando con los límites entre las formas y las temáticas propias de los medios de comunicación de masas y el arte. En octubre de 2014 interviene  en la Jornada de experiencia de usuario 2014 que se enmarca en los programas en multimedia y diseño de experiencia de usuario de la Universitat Oberta de Catalunya con su ponencia “La infografía no es arte, pero el arte si puede ser infografía”Su versátil perfil profesional le convierte en uno de los más importantes y prestigiosos  referentes en infografía del panorama internacional que es de aconsejado estudio a cualquiera interesado en la materia.

Generalmente te defines como periodista y artista. ¿Con que rol te sientes más cómodo y porqué? ¿Cómo  relacionas estas dos disciplinas con la infografía? ¿Cuándo tu trabajo es más artístico que periodístico y/o viceversa?

Me siento cómodo en ambos roles, quizás más en el periodístico ya que es un territorio con los límites más definidos y que conozco más. El lugar donde me asaltan dudas y, por tanto incomodidad, es el filo entre ambas disciplinas. A pesar de ello es un lugar donde me coloco de forma voluntaria y reiterada, pues considero que las fronteras, el mestizaje, son espacios potencialmente muy ricos para generar nuevas propuestas validas tanto para el periodismo como para el arte. Por otra parte la comodidad nunca ha sido un valor para mi.
Como completa herramienta de comunicación, con la infografía se pueden narrar hechos o verdades, realidad o ficción. Es el contenido el que definirá si se trata de un trabajo periodístico (científico) o artístico. En consecuencia, cuando aplico contenidos que pertenecen al mundo de la subjetividad -generalmente a mi propio mundo íntimo- entiendo que estamos frente a un trabajo artístico, independientemente del formato y modo de divulgación. De este modo yo considero pertenecientes al mundo del arte algunos trabajos míos, como ‘Datos en los bolsillos’ o ‘Vida sexual de una pareja estable’, publicados como opinión en medios de masas tan alejados de intenciones artísticas como La Vanguardia, Clarín o Courrier International. No me parece necesario el espacio expositivo para considerar que se trata de trabajos con una naturaleza artística, es más, el papel prensa amplifica el cuestionamiento que plantean estos trabajos sobre la capacidad –o incapacidad-de comunicarse que los humanos tenemos y la inutilidad de los datos como material para el enriquecimiento del individuo.

Cuando, por el contrario, el contenido esta sujeto a la agenda periodística, a hechos ‘objetivables’ o a datos colectivos y el canal de difusión –aquí si es fundamental- sea un medio periodístico estamos frente a una infografía periodística.

Vida sexual de una pareja estable. Jaime y Francisca, 74,2 cm x 210 cm.  La pareja durante 2010 tipifica sus prácticas sexuales habituales y anota en un calendario los dias que tienen relaciones según su clasificación.   Para la representación formal se traza una línia negra por cada día del año y se divide cada una de las 365 lineas en 7 más delgadas que representan cada una de las prácticas mediante un color diferente.
Vida sexual de una pareja estable. Jaime y Francisca, 74,2 cm x 210 cm. La pareja durante 2010 tipifica sus prácticas sexuales habituales y anota en un calendario los dias que tienen relaciones según su clasificación. Para la representación formal se traza una línea negra por cada día del año y se divide cada una de las 365 líneas en 7 más delgadas que representan cada una de las prácticas mediante un color diferente.
Leyenda con las prácticas sexuales catalogadas por color.
Leyenda con las prácticas sexuales catalogadas por color.

Originalmente empezaste como profesional de la ilustración. ¿Cuál fue el proceso que te llevo hasta la infografía?

El ‘proceso’ fue la casualidad. Un modo extraordinario y poco habitual de llegar a los sitios. A fines de los 80’s entre mis clientes como ilustrador se encontraban algunos medios como El Periódico de Catalunya. Cuando el diario se planteó crear su propio departamento, me consultó sobre algún profesional que se adecuara. Me ofrecí yo mismo para el puesto, interesado principalmente en aprender a utilizar el (uno) ordenador Mactintosh que habían adquirido para el departamento y que hacia pocos años que habían aparecido en el mercado con unos precios inalcanzables para un particular. Pero en verdad donde llegue fue al inicio de algo que nadie tenia muy claro como debía ser. La posibilidad de crear, de definir toda una nueva herramienta de comunicación y el pulso periodístico me ‘engancharon’.

Cuéntame en unas pocas líneas qué defines tú como infografía.

La infografía es una herramienta de comunicación de alta precisión. Aunque se trata de una herramienta esencialmente visual, se apoya a menudo en la palabra. Utiliza por tanto dos lenguajes de forma combinada: la palabra y la imagen. Donde uno no alcanza, llega el otro, de tal modo que en una infografía que exprima al máximo sus posibilidades, el contenido informativo no se comprende con la ausencia de uno de los dos lenguajes.

La infografía como la conocemos en los medios de prensa y comunicación nace casi al mismo tiempo que tú te implicaste en ella. Podríamos considerarte pues un pionero en la misma. ¿Qué recuerdas de esos inicios cuando los comparas con el estado actual? ¿Qué ha cambiado claramente y que se mantiene en esencia?

Hoy hay unos límites bastante definidos de que es infografia periodistica y hasta donde se puede ir con ella como una herramienta más dentro de la confección de un medio. El espacio activo que ocupa el departamento dentro del proceso de confección del diario y el rol del infografista como periodista hoy es un hecho. Esto hace que, en general, seamos mucho más rigurosos que en aquella época donde se consideraba al infografista mucho más un diseñador o ilustrador que un periodista. Como contrapartida es posible que seamos más previsibles, menos ‘frescos’.

En tu trayectoria profesional hasta tu posición de columnista y director de infografía en el diario La Vanguardia , has trabajado para números medios de comunicación tanto en Europa como en América. ¿Qué te ha aportado profesionalmente este tipo de dinámica de trabajo? ¿Tienes alguna época especialmente satisfactoria que te permitiera experimentar y desarrollar el lenguaje visual de la infografía?

Sin lugar a duda viajar, vivir otras culturas y realidades resulta muy enriquecedor como individuo y, si se tiene la fortuna de poder hacerlo trabajando en algo vocacional, resulta también enriquecedor como profesional. Creo que una persona más rica deviene en un profesional con una mirada con más aristas, menos ingenua. En el periodismo y en el arte una persona más rica es un mejor profesional. Pero, además del enriquecimiento personal y consecuentemente profesional, trabajar en grandes medios, con otras realidades, te permite conocer dinámicas de trabajo diferentes que necesitan soluciones diferentes. Aprendes a gestionar mejor capacidades y espacios de creación. Te abre también a la mirada de lectores de otras culturas, con otras miradas. Es sin duda, una de las experiencias más enriquecedoras en todo sentido.

Hay dos épocas especialmente satisfactorias profesionalmente para mí en relación con los medios de comunicación. La primera es la etapa en el diario argentino Clarín, aproximadamente de 1995 hasta 2001. Esa época me ofreció una segunda oportunidad para repensar la infografía. La inexistente cultura infográfica en la Argentina de aquel momento me dejaba en una situación de solitud que resultó muy dura, pero que a su vez me permitió replantearme la profesión, tensar límites. Esto, además, en una cultura como la de Buenos Aires de gran riqueza periodística. De ahí surgen trabajos que han sido reconocidos como un punto de inflexión en esta profesión. Para mi es especialmente relevante el criterio que resumo como ‘la estética como ética’ que aplicamos en Clarín con indudable éxito y reconocimiento internacional.
La otra época es la que estoy viviendo ahora investigando las posibilidades de una narrativa más intima, más ligada al arte, conceptual y formalmente pero sabiendo encontrarle también a estos trabajos un espacio en los medios de comunicación, digamos, convencionales. En el filo entre ambas disciplinas.

Es un lujo disponer del espacio que un medio como La Vanguardia me permite como columnista. Esta es una etapa de experimentación más radical que la que fue en su momento Clarín y que quiero mantener deliberadamente libre de prejuicios, abierta a donde pueda llevarme, consciente (o no) de los errores que seguramente estoy cometiendo.

A grandes rasgos ¿Cómo funciona la metodología de trabajo de un infografista?

  1. Definición del tema a desarrollar
  2. Investigación/documentación
  3. Edición de la información obtenida
  4. Traducción de la información escrita en elementos visuales
  5. Redacción de textos
  6. Realización formal de la infografia
  7. Edición de textos y chequeo de fuentes

¿Dónde buscas tus referencias o espacios de inspiración? ¿Tienes algún referente en el campo del arte o del periodismo? Descríbenos algún trabajo que para ti tenga especial significado y tengas presente en tu práctica profesional.

Son tantas las influencias que una persona que permanezca atenta puede recibir diariamente, que el hecho de depurarlas, para conseguir una mirada propia, ya es en si un trabajo notable. Aunque siempre que se me pregunta sobre infografía debo prestar atención sobre si me cuestionan sobre infografía periodística o artística, pues mi respuesta será muy diferente. En el caso de las influencias no es necesario pues son las mismas y no detecto que las más pronunciadas tengan una relación directa ni con el periodismo ni con las artes plásticas. El arte popular, las texturas naturales o arquitectónicas, determinada música –que influye directamente en el estado de animo, especialmente durante la producción y que creo que le dan un ‘tono’ a los trabajos- y algunas películas o novelas serían los genéricos.

Con todo me animo a dar dos nombres propios que no solo se han mantenido con los años si no que el conocimiento más profundo, tanto de su obra como de su persona, ha aumentado su influencia en mi trabajo: el escritor William S. Burroughs y el artista Marcel Duchamp.
En el caso de Duchamp, influencia generalizada en profesionales vinculados con las expresiones artística, la relación con la infografía es, además, directa, ya que su obra ‘La mariée mise à un par ses célibataires, même’, una de las piezas de arte fundamentales para comprender el arte actual, es seguramente el ejemplo más acabado de lo que yo denomino ‘infografia subjetiva’. Se podría decir pues que una de las obras fundamentales del arte del pasado siglo es una infografía.

Cuando se trabaja con datos e imagen a menudo se establecen comparaciones y/o diferencias, que evidencian cierta información a priori oculta y que puede resultar controvertida según la temática que analicen. ¿Encuentras este tipo de situaciones a menudo en tu práctica profesional? ¿Cómo se afrontan? ¿Cómo debería ser el código deontológico para el infografista? ¿Cuéntanos algún caso concreto que recuerdes haber tenido?

Ocurre, aunque por desgracia no es habitual. En Infografía, salvo en la visualización de datos, que precisamente consiste en sacar a la luz escenarios que de otro modo son invisibles, suele ser previsible lo que aparecerá.

Lo que si resulta habitual, aunque no sea exclusivo del trabajo infográfico, es que con preguntas adecuadas consigas respuestas interesantes: hace algún tiempo la sección de Política de La Vanguardia proponía un pequeño gráfico sobre una propuesta del gobierno central para modificar a la baja el número de diputados por provincias en diferentes autonomías. El argumento consistía en la reducción del gasto. Me llamó la atención que en alguna provincia la modificación aumentaba el número de diputados en lugar de disminuirlos. Después de algunos cálculos de compleja matemática electoral con un especialista lo que visualizamos es que la modificación resultaba en una mayoría electoral en todas las comunidades propuestas para el partido en el gobierno. Obviamente ese era el verdadero motivo de la propuesta y la gráfica ya no era el número de diputados, si no las mayorías parlamentarias antes de la propuesta y después.

En cuanto al código deontológico que debe regir la practica de un infografista es muy sencillo: el mismo que se aplica a cualquier otro periodista.

Hoy en días vemos resurgir con fuerza lo que se viene denominado como el “Big data” y la visualización de datos, pero… ¿No es esto algún tipo de infografía? ¿O es la infografía parte de ello? ¿Qué relaciones estableces entre estos términos?

Si entendemos por Infografía la acepción anglosajona información gráfica, es obvio que la denominación incluiría a la llamada visualización de datos, no de modo inverso, pues la infografía no se limita a los datos. En cualquier caso me parece poco relevante quien incluye a quien. Si es interesante una diferencia de tono conceptual entre lo que entendemos como infografia estadística y la visualización de datos. Mientras en la primera se parte de datos seleccionados, editados, donde se puede vislumbrar cual será el resultado de visualizarlos, en la segunda no. La visualización de datos consiste en sacar a la luz mediante imágenes una cantidad de datos tan enorme del que sin su visualización no podríamos extraer conclusiones, no servirían para nada. Desgraciadamente son pocas las veces que ese mundo resultante aporta alguna cosa sorprendente, realmente interesante. Por ejemplo, son bastante populares las visualizaciones del tráfico aéreo en tiempo real. A la mayoría de personas les suele parecer ‘espectacular’ y ciertamente, desde un punto de vista tecnológico e, incluso estético, lo es. Pero informativamente no aporta nada revelador, no sirve para gran cosa.

Datos en los bolsillos Objetos encontrados en los bolsillos de mi hijo durante el primer semestre de 2005, cuando tenía siete años de edad y distribuidos de acuerdo a cuatro conceptos: juego, dulce, naturaleza y magia (del interior al exterior) Papel fotográfico sobre dibond y metacrilato siliconado. 90 x 90 cm Adaptación en formato poster para la exposición Big Bang Data del CCCB, Barcelona, España
Datos en los bolsillos Objetos encontrados en los bolsillos de mi hijo durante el primer semestre de 2005, cuando tenía siete años de edad y distribuidos de acuerdo a cuatro conceptos: juego, dulce, naturaleza y magia (del interior al exterior) Papel fotográfico sobre dibond y metacrilato siliconado. 90 x 90 cm Adaptación en formato poster para la exposición Big Bang Data del CCCB, Barcelona, España

Tu trabajo de periodismo en infografía ha sido reconocido con numerosos premios y distinciones a lo largo de los últimos años. Ahora ya también podemos verlo de un tiempo atrás hasta la actualidad en museos y centros de arte. ¿Cómo explicas esta transición del espacio de difusión al de exhibición?

Muchos de los trabajos que expongo en centros de arte tienen una versión editorial que aparece publicada en medios de comunicación de masas. Pero formalmente no son el mismo trabajo, la técnica, el soporte, las dimensiones, la convivencia con el espacio físico, la interrelación con otras obras… Son factores que permite el espacio expositivo y que permiten una mejor comunicación con el lector/espectador. Yo detecto que algunas de mis propuestas necesitan, demandan de otro desarrollo más allá del que permite el papel impreso.

Otro aspecto interesante es la mirada. La misma persona no deposita la misma mirada frente a un medio de comunicación que en un espacio de arte, y, por tanto ve la misma pieza de modo diferente. Esencialmente la diferencia consiste en que somos más abiertos como espectadores en un ámbito artístico y todo parece más fácil de comprender. Esto en si mismo me parece suficiente motivo para utilizar ambos canales de difusión. Los museos y centros de arte también son, esencialmente, espacios de difusión. Los espacios de arte ofrecen mayores posibilidades comunicativas y los medios una mayor difusión. Creo que la combinación de ambos es una buena estrategia.
Con todo, esta transición, como tu le llamas, se debe esencialmente a que he modificado mi trabajo. Mi interés principal desde hace algunos años esta en hablar desde mi subjetividad como algo que puede ser de interés a las subjetividades de los otros. Estas temáticas son, probablemente más propias del espacio artístico que del periodístico. De hecho en los periódicos y revistas, como es lógico, se publican en espacios de opinión.

Finalmente y en relación a todo esto, una pregunta que me inquieta es si estamos frente a periodismo en espacios de arte o arte en espacios de periodismo. Se que para el espectador y para muchos profesionales no es relevante, pero para mi si lo es, es fundamental saber donde están los límites.

553 rectángulos negros Instalación. Poliestireno negro, dimensiones variables. De apariencia abstracta esta instalación contiene una gran cantidad de información muy precisa. Los rectángulos que forman la composición adaptable al espacio expositivo son gráficas de tipo estadístico que abordan temáticas de índole cultural, social, económica o política. Una detallada leyenda aclara al espectador de que trata cada una de las gráficas expuestas.  Centro de Arte Contemporáneo Huarte, Pamplona, 2014
553 rectángulos negros Instalación. Poliestireno negro, dimensiones variables. De apariencia abstracta esta instalación contiene una gran cantidad de información muy precisa. Los rectángulos que forman la composición adaptable al espacio expositivo son gráficas de tipo estadístico que abordan temáticas de índole cultural, social, económica o política. Una detallada leyenda aclara al espectador de que trata cada una de las gráficas expuestas. Centro de Arte Contemporáneo Huarte, Pamplona, 2014

¿Qué otros profesionales o medios en infografía recomiendas a quien esté interesado en formarse en la materia?

La infografía cubre un amplio espectro, desde trabajos de ilustración científica a la visualización de datos. Y, en todas ellas, hay interesantes referencias. Fernando Baptista, hoy Graphics senior en National Geographic Magazine es, muy posiblemente, el mejor ilustrador científico del mundo. Su capacidad de dotar de una plasticidad propia de la pintura artística a trabajos científicos, con el rigor que NGM exige, es incomparable. Alberto Cairo es una referencia en la divulgación, es obligada referencia a todo el que quiera introducirse en los principios esenciales. El New York Times es el medio que mejor desarrolla la infografía en todos los frentes y soportes. Entró algo más tarde que otros medios pero finalmente se ha impuesto, como lo hace en cualquier otro modo de periodismo. Sus infografístas, con una mención especial a Archie Tse, merecen un seguimiento continuo. Hay también toda una serie de extraordinarios profesionales españoles en grandes medios de todo el mundo que merece la pena seguir: Chiqui Esteban en el Boston Globe, Javier Zarracina en L.A. Times, Xaquín González que acaba de fichar por The Guardian, Álvaro Valiño que colabora con NGM, Adolfo Arranz en el South China Morning Post…. la lista es realmente larga. Mencionaré de modo especial a Samuel Granados, un profesional no tan reconocido todavía, que para mi es especialmente brillante. Hace poco que ficho por el Whasington Post y estoy expectante en lo que pueda hacer, sus propuestas me parecen especialmente inteligentes, demasiado, quizás, para medios masivos.

Finalmente recomendaría seguir algunas propuestas que se están desarrollando fuera del periodismo y que por tanto son más libres. Por ejemplo los anuarios datificados sobre su misma persona, de Nicholas Felton, los análisis, profundamente poéticos de Estefanie Posavec acerca de la literatura estadounidense de mediados del pasado siglo o sobre Charles Darwin, o las instalaciones de recolección y visualización analógica de datos de Domestic Data Streamers. Con todos ellos me siento especialmente cercano. Hablar del trabajo de cualquiera de ellos nos llevaría varios folios y su trabajo se puede encontrar con facilidad en Internet.

Vivimos en un actual contexto de transición tecnológica que parece sugerir que la prensa escrita camina hacia una versión digital exclusiva. ¿Consideras que el futuro de la infografía pasará exclusivamente por la difusión en internet? ¿Cómo piensas que será esta nueva etapa? ¿Seguirá existiendo la infografía tal y como la conocemos hoy?

En un espacio de tiempo suficientemente prolongado las posibilidades de supervivencia del papel es 0%. El futuro –el presente- es digital. El uso del papel hoy corresponde a un modelo cultural, lo cual no es un argumento menor, pero desde un punto de vista tecnológico o de hábitos de vida, no tiene ningún sentido, es absolutamente decimonónico. Es solo cuestión de tiempo que la difusión sea exclusivamente digital. Pero el soporte y el medio de divulgación no es lo realmente importante en periodismo. En mi opinión el periodismo ha hecho cierta dejación de funciones. Es significativo, por ejemplo, que en actual contexto de corrupción generalizada en España el periodismo no abandere el descubrimiento de los casos.

Hay que retomar el compromiso social y la calidad, esto es el le revelación de hechos noticiosos y la explicación de su importancia en nuestra realidad mediante análisis y opinión erudita. Hay que hacerlo indistintamente del soporte en que difundamos la información.
La infografía es una herramienta antiquísima, no entiende de soportes y, de hecho, los nuevos soportes digitales favorecen sus capacidades. Como herramienta tiene un futuro saludable, pero su función periodística esta vinculada directamente al futuro de la profesión, sobre el cual tengo algunas dudas razonables.

¿Dónde podremos verte (A ti en conferencia o tu trabajo publicado o expuesto) en los próximos meses?

Publicado, con seguridad, en Courrier International y en La Vanguardia, de forma especial en el suplemento Cultura’s para el que estoy preparando una triple entrega de sus páginas centrales ‘Documental’.

Expuesto, ahora mismo y hasta el 25 de enero del 2015, se puede ver en el Centre Arts Santa Mònica, dentro de la exposición ‘Traç, el dibuix com a eina de coneixement’, una séríe de bocetos para infografías editoriales y expositivas y el original del que seguramente es mi trabajo periodístico más conocido entre los profesionales: La Ballena Franca.

Para el que no haya podido asistir a la exposición Big Bang Data, que se celebro en el CCCB hasta el 16 de noviembre, podrá verla ahora en Fundación Telefónica en Madrid. En esta muestra tengo expuesta la obra ‘Vida Sexual de una pareja estable (Jaime y Francisca 2012)’ que datifica la relación sexual que mantuve durante ese año con mi mujer y también tres piezas adaptadas a formato poster que los asistentes pueden llevarse.

A partir de febrero, en el Museo de Arte Contemporáneo Gas Natural Fenosa de La Coruña, un espacio de referencia con una extraordinaria programación, se podrá ver una exposición individual que todavía estoy ultimando.


Cita recomendada: GÁLVEZ GABARDA, Jorge. Entrevista a Jaime Serra. Mosaic [en línea], noviembre 2014, no. 122. ISSN: 1696-3296. DOI: https://doi.org/10.7238/m.n122.1444.

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Jaume Serra

Jaime Serra Palou (Lleida, España, 1964) Artista multidisciplinar y periodista. Ha trabajado durante los últimos veinticinco años experimentando con los límites entre las formas y las temáticas propias de los medios de comunicación de masas y el arte. Desde 2011 este trabajo se concreta mediante la publicación, como inclasificable columna de opinión, en el diario español La Vanguardia y en la revista francesa Courrier International. Trabajos que, desarrollados en formatos expositivos, se muestran también en espacios de arte contemporáneo. Columnista y Director de Infografía e Ilustración de La Vanguardia desde octubre del 2007. Su periodo en el diario argentino Clarín (1995/2001) es reconocido como una revolución en el lenguaje infográfico. Ha expuesto en diversas instituciones culturales tanto a nivel nacional como internacionalmente. De igual modo también ha trabajado para numerosos medios de prensa repartidos a lo largo del globo. Habitualmente ejerce como ponente en citas internacionales de periodismo y diseño, habiendo dictado clases en diversas instituciones educativas tanto en Europa como en América. También colabora como jurado especializado. Su trabajo ha sido reconocido con más de un centenar de premios y distinciones SND, SPD, Malofiej y Laus, siendo reconocido en marzo del 2012 como ‘El infografista más influyente del mundo en el periodo 1992-2012’ por la Society for News Desing, la mayor y más prestigiosa organización mundial de periodismo visual. Premio Gràffica 2013. http://jaimeserra-archivos.blogspot.com.es/

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